sábado, 23 de enero de 2010

El elefante encadenado


Hoy actualizo con algo más alegre. Se trata de un cuento que me gusta mucho ya que describe un poco lo que nos puede pasar a los jóvenes, respecto a miedos y las difíciles situaciones que se nos pueden presentar:


EL ELEFANTE ENCADENADO
Cuando yo era chico me encantaban los circos, y lo que más megustaba de los circos eran los animales. También a mí como aotros, después me enteré, me llamaba la atención el elefante.Durante la función, la enorme bestia hacía despliegue de peso,tamaño y fuerza descomunal... pero después de su actuación yhasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de suspatas a una pequeña estaca clavada en el suelo.

Sin embargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio queese animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir.El misterio es evidente:¿Qué lo mantiene entonces?¿Por qué no huye?Cuando tenía cinco o seis años, yo todavía confiaba en lasabiduría de los grandes.

Pregunté entonces a algún maestro, a algún padre, o a alguna tía por el misterio del elefante. Alguno de ellos me explicó que el elefante no se escapaba porque estaba amaestrado—Hice entonces la pregunta obvia:—Si está amaestrado ¿por qué lo encadenan?No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente.

Con el tiempo me olvidé del misterio del elefante y laestaca... y sólo lo recordaba cuando me encontraba con otrosque también se habían hecho la misma pregunta.Hace algunos años descubrí que por suerte para míalguien había sido lo bastante sabio como para encontrar larespuesta:El elefante del circo no escapa porque ha estado atado auna estaca parecida desde que era muy, muy pequeño.

Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacidosujeto a la estaca.Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo no pudo.La estaca era ciertamente muy fuerte para él.Juraría que se durmió agotado y que al día siguientevolvió a probar, y también al otro y al que le seguía...Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a su destino.

Este elefante enorme y poderoso, que vemos en el circo,no escapa porque cree –pobre— que NO PUEDE.Él tiene registro y recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que sintió poco después de nacer.Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro.Jamás... jamás... intentó poner a prueba su fuerza otra vez...

Éste cuento me hace pensar sobr la vida, como actuar, en que te basas para tomar decisiones, muchas veces intentamos cosas que ya sabemos cual va a ser el resultado y directamente abandonamos, porque se nos puede hacer grande el asunto, o sólo porque tenemos preconcebido que no vamos a poder hacerlo, y abandonamos a la primera de cambio.

En cambio a veces nos sorprendemos a nosotros mismos y depués de enfrentarno sí podemos superar las dificultades, como en el cuento dice, somos capaces de romper la cadena e intentarlo una y otra vez hasta que nos conseguimos soltar.

También creo que este pensamiento nos pasa por la cabeza a todos los deportistas de resistencia, siempre hay en la cabeza como un pensamiento de no poder, de no entrenar demasiado, de no dedicar bien el tiempo, como que nos falta el tiempo en el día y necesitamos días de 30 horas para poder entrenar más sin dejar de lado el resto de aspecto social, laboral, etc.

Desde aquí te animo a que pienses en cuantos no puedos o cosas interiorizadas tienes que te impiden avanzar y lograr tus metas. Recuerda siempre el QUERER ES PODER!!!, y reflexiona sobre cuantas cosas crees que no puedes y alomejor realmente es porque no lo quieres tanto como para intentarlo con todas tus fuerzas.

Mi objetivo con ésto es de que te des cuenta y que si en verdad tienes ese "LASTRE " o fantasma, pienses una forma de quitartelo de encima, y no seguir del todo el dicho de "Más vale lo bueno conocido que lo malo por conocer", a veces conviene arriesgar un poquito y ver que es lo malo por conocer, al fin al cabo " El que no arriesga no gana"...


CONSTANCIA Y CONFIANZA, TODO ESTÁ EN EL COCO.



viernes, 22 de enero de 2010

La cosa sigue...






Justo hoy hace un mes, así que unas palabritas para los que están al otro lado del charco. Se suponía que mi siguiente actualización iba a ser sobre mi viaje por USA, pero no ha podido ser así, por tanto un poquito de motivación para la people.


-La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente.


-El duelo no es un camino fácil pero... sino lo fuera... dejaría de tener sentido toda nuestra existencia.

-Eres más consciente que antes de lo que es importante y lo que es trivial. Tu ser querido vivió, pero tú todavía estas vivo. ¡Vale la pena esperar al futuro!
-Lo que importa no es lo que la vida te hace, sino lo que tú haces con lo que la vida te hace.
-Dame la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar las cosas que puedo y sabiduría para poder diferenciarlas.
La verdad es que no soy muy amigo de éstos momentos, quiero decir, no que no sea amigo pero sí que no se qué decir, veo estúpidas las siempre palabras de ¿qué tal?, hay que ser fuertes, manténte entretenida, la vida sigue y todas esas palabras que (¿alentadoras o desalentadoras?), siempre se repiten, porque ¿acaso crees que van a ayudar?, sí sé que obvio hay que hablar algo y decir alguna frase para subir el ánimo y tal, pero como no soy muy de expresar mis sentimientos, menos incluso en éstos casos que poco hay que decir..., no sé yo que es mejor si decir alguna frase de éstas comunes o directamente no decir nada, al fin al cabo es el destino dónde todos vamos, y antes o después llegará, luego también están las comparaciones de era joven, era viejo, bla bla bla, en fin............................ he conseguido un texto que me ha gustado mucho y lo quiero compartir con todos vosotros.
SI PERDISTE UN SER QUERIDO Y NO TIENES CONSUELO... Siempre hay gente que en los últimos años ha perdido familiares, seres queridos, y los ha perdido de pronto, algo que no esperaban, tal vez no fue a través de una larga enfermedad sino que fue a través de un accidente, de un robo, lo mataron en la calle, tuvo un accidente de auto. Hay mucha gente que no se puede reponer, que tiene muchas preguntas y no tiene las respuestas. Por eso hoy vamos a tratar de dar alguna respuesta, y creo que hay una que es la principal. Ustedes saben que a lo largo de toda nuestra vida los seres humanos podemos sufrir más de cuarenta pérdidas emocionales, por ejemplo: la muerte de un ser querido, que es lo que vamos a estar hablando hoy, la muerte de una mascota, el cambio de domicilio, la graduación, el casarse, el terminar con una adicción, una enfermedad grave que aparece en tu vida, la jubilación, cambios financieros, problemas legales, dejar el hogar. Todo esto nos provoca pérdidas emocionales, perdemos algo bueno o malo y pasamos a otra situación buena o mala pero siempre algo perdemos.
Esas pérdidas emocionales nos provocan "pena”. ¿Cuántos sintieron pena alguna vez en su vida?, cada vez que pierdes algo, se provoca la pena, y la pena no ha sido muy bien entendida, y no hemos sabido cómo ayudar a otra persona, cuando esa persona se encuentra en una pena. Lo primero quehay quen decir y tener bien claro, es que tener pena frente a una pérdida, sentir dolor frente a una pérdida, es normal.
Que nadie te juzgue por sentir pena. La pena es el resultado de dos sensaciones que se contradicen entre sí, por ejemplo: el día que falleció mi papá yo tenía diecinueve años, y ese mismo día a mi me pasó algo extraño, que yo me culpaba por sentirlo, hasta que entendí que era algo normal, por un lado decía: murió, ¡qué bueno! no voy a tener que estar esperando nunca más a que él venga, porque yo me acuerdo que todos los días esperaba que él llegara a casa, y que no le haya pasado ningún accidente y cada vez que llegaba, que oía las llaves, que él entraba en casa decía: gracias Señor porque lo trajiste sano, y cuando él murió, lo primero que se me pasó por la mente fue decir: ahora ya no me voy a tener que preocupar más por eso, porque él ya no está, o sea por un lado sentía alivio y por el otro lado, tristeza, dolor y angustia, ya que no lo iba a poder ver más, ya no podría hablar más con él, ya no iba a poder abrazarlo más, nunca más podría darle un beso o que él me diera un beso a mi, esas dos sensaciones, esas dos experiencias se juntaron y es lo que a veces no entendemos de la pena. Por ejemplo: la pérdida de un matrimonio, un divorcio ¿Cuántas se divorciaron? tu te divorciaste y por un lado dices: tengo alivio de que ya no voy a pelearme más, no voy a discutir más, no voy a estar más bajo presión, pero por el otro lado el dolor y la tristeza de tantos años vividos juntos y la inquietud de, ¿qué va a venir de aquí en adelante? o sea esas dos sensaciones se juntan en la pena, alivio y dolor y no tenés que sentirte culpable por sentir ninguna de las dos, se puede sentir alivio y dolor a la misma vez, es natural. La pena está relacionada con el corazón y no con el cerebro, por eso, cada vez que a una persona que pierde algo, que está sufriendo, le queremos dar explicaciones racionales, no le ayudan para nada, decir: no ayudan. Porque la pena no pasa por la cabeza, pasa por el corazón, se siente, y no podemos aliviar la pena de nadie tratando de darle respuestas racionales, el otro puede entender todo claramente, pero la pena sigue estando en el corazón. ¿Y saben cuál es el gran problema? que estamos muy mal preparados para ayudar a una persona que está pasando por dolor, especialmente le hablo a la gente que ha venido de iglesias, que ha estado en iglesias donde le dijeron un montón de frases que ahora vamos a ver.
Por ejemplo: desde chiquitito, cuando perdías algo, los más grandes te decían: No te sientas mal, no llores, trataban de consolarte con esa frase, entonces ¿qué pensabas por dentro?, que tenías que reprimir el llanto, que tenías que reprimir la emoción, porque llorar frente a la pérdida estaba mal. Otra frase que nos decían era: no importa, ya vas a conseguir otra esposa, se te murió el perrito, la semana que viene te compro otro, o sea había que reemplazar lo perdido, eso no sirve. Otra de las frases era: el tiempo sana las heridas, el tiempo sana todo, y esa es una gran mentira porque el tiempo no sana nada, lo que sana es lo que hagas en ese tiempo, no el tiempo por sí sólo, si te sientas a esperar la sanidad, la sanidad no va a venir y el tiempo se va a hacer largo, porque el tiempo no sana heridas sino lo que hagas en ese tiempo de espera es lo que te puede levantar de una pérdida.
Otra de las frases es: sé fuerte para los demás, sé fuerte para tus hijos. ¿A cuántas le dijeron eso?, tenés que ser fuerte, tu eres el sostén de la familia y tu en ese momento de dolor, no sabes quienes son los demás, en ese momento existís tú y tu dolor, no puedes ser fuerte para nadie, no sirve de nada que alguien diga eso.
Otra de las frases es: mantenete ocupado, se te va a pasar, te vas a olvidar. Mantenerse ocupado tampoco soluciona nada, porque puedes estar ocupado todo el día, pero llega la noche y el vacío, el dolor, la tristeza vuelven a venir a tu vida, porque no estás sanado, está tapado, la ocupación no es mala, es buena pero es simplemente una distracción, pero eso no sana la pena de la pérdida, por eso ninguna de estas frases ayudan, así que no se las digas a nadie.
Aunque nos sale naturalmente, nosotros crecimos con esas frases y nos dijeron a nosotros esas frases cuando perdimos un ser querido. Otra frase: yo sé lo que estás sintiendo en este momento porque a mi me pasó exactamente lo mismo, y esa es una gran mentira, porque si se te murió tu mamá y viene otra mujer, que también se le murió la mamá y te dice: yo te entiendo porque pasé por lo mismo, no es lo mismo, porque mi relación con mi mamá no es igual que la relación que ella tenia con su mamá, tal vez mi relación era mala o mi relación era buena, y la relación de ella con la mamá era mala por eso no podemos sentir lo mismo, no podemos saber lo que se siente porque toda relación es única.
Decir: toda relación es única. Hay otra gente que para consolarte te cambia el tema, vieron que hay gente que no quiere hablar de la muerte, dice: sí, se fue, partió no puede decir se murió, no puede hablar de la muerte, la tiene como escondida, esas son un montón de frases, o cambia de tema y vos le estás diciendo: estoy destrozada, no doy más, siento que me estoy muriendo que no tengo fuerzas y la persona te dice: no te preocupes él está con el Señor, él ya no sufre más, tu dices y a mi qué me importa ahora eso, yo te estoy hablando de mi sufrimiento, de lo que yo siento, ya sé que él está bien, que ya está en paz, ya sé que no tiene más dolor, pero te estoy hablando de mi sufrimiento, yo estoy triste, yo lo extraño, yo me siento mal, ¿se entiende eso?,
¿Cuántas dijeron esas frases alguna vez?, todas y se nos van a escapar frente a la pérdida, como no sabemos qué hacer se nos van a escapar esas cosas, nos salen naturalmente . Después están los que filosofan y te empiezan a soltar frases armadas, por ejemplo: tu estás vivo y hay que seguir viviendo, estás en medio del baile y hay que bailar, o la otra frase: todo en esta vida tiene un final, o la otra frase: tuvo una vida buena, vivió lo que tenia que vivir, encontrarás a alguien más, o da gracias que lo tuviste unos cuantos años contigo. Lo que nos pasa comúnmente es que al encontrarnos con una persona que ha sufrido una pérdida, la sermoneamos, le tiramos todas estas cosas juntas, ¿se imaginan? una hace mal, todas juntas te destrozan la vida. Sermoneamos en lugar de escuchar y lo que necesita la persona que ha tenido una pérdida, es poder expresar todo su dolor y que alguien solamente escuche, yo quiero decirte que la recuperación del dolor de una pérdida, en parte se da cuando esa persona puede ser escuchada.
¿Cómo nos recuperamos de una pérdida? cualquiera sea. Primero: tengo que saber que la muerte es inevitable. Te va a pasar a tñi y a mí. Los dos nos vamos a morir, y depilate porque en el cajón el pelo te sigue creciendo, como cuando te decía tu mamá, siempre tienes que llevar la camisa limpia, por las dudas que te pase un accidente, de buena manera tu mamá, acá lo mismo, tu siempre depilada porque no sabes el día que te puede venir, porque es inevitable, depiladita, completita entonces estás en el cajón siempre arreglada. Tu tienes que saber que morir es inevitable, todos nos vamos a morir.
Tu tiempo para nacer ya fue, ahora nos queda el tiempo para morir y es natural, la muerte nos va a ocurrir a todos, más allá de que la muerte siempre sorprende, especialmente si es una muerte trágica, si es una muerte que se dio de golpe, siempre la muerte sorprende nos da bronca, si encima la muerte fue repentina, es como que te hagan una cirugía sin anestesia. La muerte siempre es como una cirugía en tu vida porque te sacan una parte de tu vida, ese ser que tu amas, que tu quieres, pero cuando encima es así, tan sorprendente, es una cirugía que te están haciendo y donde no te pusieron anestesia, tu estabas actuando un libreto de la vida, tenias todo armado de una manera, y de pronto te hacen actuar otro libreto, con un personaje menos en la historia, la adaptación tiene que ser muy grande y ahí es donde empezás a sentir.
Los que hemos perdido a un ser querido, sabemos que la sensación es que no vas a poder soportar la vida sin esa persona, ¿a cuántos les pasó eso? O te sientes adormecido cuando te lo dicen, como que no lo podes entender, ¿esto me está pasando a mí? ¿Que a mi se me murió esa persona? ¿Me viene a tocar esto a mí? como un adormecimiento. Aparecen cambios emocionales y una sensación de falta de fuerza y de desgaste, como que no podes enfrentar la vida. Esas son las sensaciones que aparecen, pero quiero decirte que tienes que tener bien en claro, que la muerte es inevitable, venga como venga, a través de un accidente, a través de una enfermedad larga, que fue de golpe, que fue porque mataron a alguien, de alguna manera vamos a morir, pero eso lo tenemos que saber, porque es inevitable.
Segundo lugar: no tengo que actuar como si no hubiese pasado nada. Hay muchas personas que dicen: tengo que recuperarme rápido, porque sino, pierdo un montón de gente, la gente no quiere estar conmigo si estoy llorando, no me van a aceptar, qué van a decir, no puedo cargar con este dolor tanto tiempo, y tienes que darle permiso a ese dolor, yo no te puedo decir cuánto puede durar el dolor, porque cada persona es diferente, cada relación es única, cada emoción es distinta, por lo tanto no te voy a decir cuánto tiempo va a estar el duelo, pero tiene que ver con que vos puedas estar sano totalmente, no con el apuro de los demás, porque los demás siempre te van a apurar, porque no quieren verte en esa situación, quieren que estés bien para ellos, para no tener que cargar con tu pena, con tu angustia, y con eso que tampoco pueden explicar o pueden resolver.
Hay muchos que viven como si ya todo hubiese pasado, pero en realidad la procesión va por dentro. Miren la estrategia que usan algunas mujeres. Pensar en la persona que se murió en términos de todo positivo, eso se llama "divinizar" a la persona que murió, o sea, era bueno, era preciosa, nunca cometió un error, nunca tuvo una pelea, era un santo, era una santa, y divinizan, pero eso nunca te va a ayudar a recuperarte, porque las relaciones no son totalmente positivas o totalmente negativas. Toda relación interpersonal tiene sus altos y sus bajos, tiene sus cosas buenas y sus cosas no tan buenas y hay personas que dicen: no hables mal de los muertos, no hay que hablar mal ni de los muertos ni de los vivos, pero tampoco podes hablar todo bien, porque te estás mintiendo y miren qué interesante, porque cuando una mujer diviniza a la persona que murió, se siente culpable, porque dice él era un santo, era buenísimo, yo era la mala de la película, por eso él se murió antes, porque no me aguantaba más. Tampoco envilezcas a la persona, es lo contrario a divinizar, era malo, un desastre, menos mal que se fue no, no, no, porque en toda relación siempre hay intercambios positivos y negativos y para poder recuperarte de una pérdida tienes que ser honesta cotigo mismo, no hay nada mejor que ser honesta con uno mismo en todas las relaciones interpersonales.Yo grababa un programa el viernes y hablaba sobre la mentira y decía que hay mujeres que les encanta vivir en medio de la mentira, prefieren la mentira a conocer la verdad, lo único que te puede hacer libre en la vida es conocer la verdad. Saber que la muerte es algo que nos va a pasar a todos. No divinizar ni demonizar a la persona que murió. Saber que tenía cosas buenas y cosas malas. Que hubo momentos que te hirió, que hubo momentos que te hizo feliz y la pasaste bien y a la vez, momentos en la que tu le diste mucha felicidad, y momentos que contigo no lo pasó muy bien.
Pero eso pasa en todas las relaciones interpersonales.
Tercer lugar: me debo preguntar ¿qué me hubiese gustado que fuera diferente? Se murió, no tengo más a esa persona, qué me hubiese gustado, que en esa relación fuera diferente, el núcleo del dolor de la pérdida es lo que dejé pendiente con esa persona, ese es el dolor más grande: ¿Qué quedó pendiente? ¿Qué cosas no le dije? ¿Qué cosas no hice? ¿Qué cosas le grité? ¿Qué cosas me dieron bronca y nunca se lo pude decir? Si nosotros estuviéramos un día todos juntos yo te puedo asegurar que al otro día vamos a decir: sabés las cosas que te hubiera dicho ayer, pero sin embargo hacemos silencio, si en una relación de un día quedan cosas pendientes, cuanto más en una relación afectiva de diez, quince, veinte años. Por eso el núcleo del dolor es lo que quedó pendiente. Lo que me quedó pendiente, lo que queda sin solucionar, y por sobre todas las cosas, tus expectativas que no pudieron hacerse realidad, porque cuando nosotros tenemos una pareja, o nuestros hijos, o una mamá, nosotros armamos un mundo y armamos los sueños alrededor de esa estructura, nuestros sueños propios, y cuando una de esas personas se va, queda como el escenario movido, y nuestras expectativas parece que empiezan a morirse. Yo pensaba que si estaba él, yo contaba con el sueldo de él, y contaba con que mi hijo me ayudara, yo contaba con que si él estaba, entonces yo podría salir a trabajar, y podría seguir estudiando y ahora frente a esta pérdida mis expectativas también están muertas, no sólo se muere el ser querido, sino las expectativas se mueren. Una de las cosas que quedan pendientes es saber a aprender a perdonar, porque se fue, y esa expectativa no se puede cumplir, aprender a perdonar y también aprender a pedir perdón, y hacer ciertas declaraciones, esto se lo recomiendo a las personas que han perdido un ser querido, hacer ciertas declaraciones emocionales importantes. ¿Cuáles son las declaraciones emocionales importantes? Te amé siempre. Sentí que fuiste egoísta conmigo. Te extraño mucho. Nunca te voy a olvidar. Gracias por el tiempo que estuvimos juntos
Y poder soltar o decir, te odiaba, te odié toda mi vida, me arruinaste la vida, poder decirlo para sacarlo de adentro, porque si queda adentro te termina enfermando, por eso hay que soltar esas declaraciones, esas cosas que quedaron pendientes, que no le dijiste, ese gracias que tal vez no le pudiste decir, porque se fue y no tuviste tiempo, porque cuando se lo quisiste decir, tal vez ya no te escuchaba, tal vez no se te dio la oportunidad, o no te atreviste, por temor a lo que respondiera. Tenés que buscarte una compañía, alguien, una mujer o un varón que represente a esa persona, que te haga la pata en ese momento, mirá te quiero decir algunas cosas que no son para tí, en realidad son para la persona que se fue, pero necesito sacarlas de adentro mío, y necesito contarte esto que me está pasando, ¿me permites?, y hay siempre gente puesta por Dios en nuestro camino que nos va a ayudar a recuperarnos.
Tal vez a un hijo nunca le dijiste que estabas orgulloso de él y lo puedes hacer, tal vez se lo puedes decir ahora, porque siempre el dolor más profundo es lo que quedó pendiente, y no puede quedar guardado porque sino te trae culpa, la culpa te enferma, la culpa te ata y no te permite seguir avanzando, hay que soltarlo. ¿Para qué lo vas a soltar?, para estar en paz con tu pasado y poder empezar a mirar otra vez afuera, porque ahora estás encerrado en el dolor, mientras no tengas paz con tu pasado, mientras haya cosas pendientes, vas a estar atado al dolor de tu pasado, y no vas a poder mirar para afuera. ¿Cuánta gente hay que todavía sigue guardando las cosas de la persona que ha muerto?, está bien, ténlo hasta el tiempo que tengas que tenerlo, pero hay un momento donde tienes que empezar a deshacerte de esas cosas para poder empezar a mirar afuera, tal vez hoy digas tengo todo esto, y separo algo, esto lo quiero dar, esto lo voy a guardar, porque no lo puedo dar todavía, mis emociones no me ayudan a darlo, tal vez esto lo voy a dar la semana que viene, y vas separando hasta que va pasando el tiempo, y eso que no podías dar, lo vuelves a dividir y dices: esto sí lo puedo dar, esto lo voy a dar la semana que viene y esto lo guardo, y de a poquito te vas a ir desprendiendo de aquellas cosas que todavía te siguen atando al pasado, nunca lo hagas rápido, tenés que aprender a darte tu tiempo. Aprendé a respetarte y a darte tus tiempos.
Pues eso que más que otra cosa ¿qué podemos hacer?, cada uno que lo mire por dónde quiera, yo la verdad no sé cómo actuar en estos casos, si igual pecas de decir pocas palabras, o lo mismo es mejor hacer como caso omiso, que decir la vida sigue, que bueno era, así al menos descansa, y bla bla bla bla, palabrería...
Eso sí hay una cosa que está clara y es que era uno de los grandes!!!!
D.E.P
Espero que pueda servir un poco de motivador-sedante.
Besos.
Y como mucho en 2 día actualizaré de nuevo.
P.D: Supongo que ya os habréis dado cuenta de que no hay casi espacios entre textos, pero no sé porqué no me deja separar las párrafos, perdón.

domingo, 3 de enero de 2010

Palabras desde Los Ángeles

Llevo viajando por la costa oeste desde el 16 de diciembre, primero fue San Francisco, luego Los Ángeles, Las Vegas, Gran Canyon, Sequoia, San Diego y LA de nuevo, ahora sólo me queda Chicago para terminar el viaje.

Siempre hay momentos de nostalgia, en los que nos acordamos de los que están más lejos.
Pero lo más curioso es la cantidad de gente que pasa por nuestras vidas, algunas sólo duran unos minutos, otras espero que muchos años, diferencias culturales, políticas, color de piel, idiomas, formas de pensar, pero al fin al cabo el ser humano es uno, y a veces por mucho que nos parezca que somos tan dispares, sólo somos uno y somos más parecidos de lo que nos podemos imaginar, y como dice algún spot, " EL SER HUMANO PUEDE SER MARAVILLOSO"...

Para terminar unas palabras que vienen muy bien para esos momentos en el que no sabemos que es la vida, si un sueño, un sufrimiento, algo que pasa... al fin al cabo lo mejor es disfrutar con lo que haces y quererse a uno mismo:

- Si te apasiona algo, EMPIEZA desde ya. No lo dejes para mañana.

- Ten un PLAN, porque aquello que planificas tiene más posibilidades de acabar bien. Y que el plan sea ambicioso, pero realista.

- CUIDA TU CUERPO, tanto si quieres completar un IM como si quieres llegar en buen estado a la vejez.

- INVIERTE tiempo y dinero en conseguir tus objetivos. Prescinde de lo secundario.(ésto gracias a mis ideales inculcados se me da bastante bien)

- Piensa en POSITIVO. El camino hacia el objetivo suele ser largo y es más fácil llegar si piensas que puedes hacerlo. Pensar en positivo es comenzar a cumplir el objetivo.

- Rodéate de GENTE cojonuda. Evita a los cenizos, a los chupadores de energía y busca a gente positiva y entusiasta.

- LEVÁNTATE cada vez que te caigas. En el camino habrá obstáculos, más de los que piensas. Una de las diferencias entre el que triunfa y el que fracasa reside en la capacidad de aprender de los errores.

- AVANZA siempre, aunque a veces no sepas muy bien por qué o en qué dirección. Mantente en marcha hacia el objetivo siempre.

- TRANSMITE tus experiencias a aquellos que lo necesiten. Has aprendido mucho de los que lo hicieron antes, así es que tienes un deber moral de ayudar al que te necesite ahora.

Como objetivo principal acuérdate de disfrutar tu vida, o cómo siempre digo en inglés a los que son un poco amargadillos, ENJOY YOUR LIFE MAN!!, sea cómo sea, estudiando, trabajando, entrenando cómo y dónde sea no olvides de ser tu mismo siempre!! y vive como quieras que sólo vas a vivir una vez, por tanto no puedes quedarte sentado a ver que hace tu vida contigo, sino que somos nosotros mismos quienes debemos de construirla.

En fin que a veces creo que paso de hacer una crónica a meterme a filósofo.

Agradecer desde estas líneas el estupendo viaje a quienes ya nos han dejado, Max, Jiang, Jason, Simon y Nathalie, y a los que aún permanecemos Juuso, Julius y Carlos. Y cómo no agradecer a quienes están haciendo que ésto (sueño o realidad sea posible), un abrazo y a vender muchos roscones!!! BESOS!!